Les cuento que estuve un par de días en la ciudad de Buenos Aires. Está hermosa como siempre, tiene edificios espectaculares, y sin dudas allí está todo: oficinas para todos los trámites nacionales, maravillosas librerías, arte, espectáculos y muchas cosas más.
No dejé de notar la diferencia que existe entre sacar fotos en la calle en Rosario y en Buenos Aires. En Rosario me miran con curiosidad, en Buenos Aires no me miraban, así que una vez que una mujer me llevó por delante, aprendí que las fotos se sacan bien pegadita a la pared.
En esta foto, el cartel indica cuál es la vestimenta adecuada para entrar a la Catedral.
No dejé de notar la diferencia que existe entre sacar fotos en la calle en Rosario y en Buenos Aires. En Rosario me miran con curiosidad, en Buenos Aires no me miraban, así que una vez que una mujer me llevó por delante, aprendí que las fotos se sacan bien pegadita a la pared.
En esta foto, el cartel indica cuál es la vestimenta adecuada para entrar a la Catedral.
La ciudad de Buenos Aires tiene su encanto, es cierto.
ResponderEliminarY las fotos también.
Un saludo.
Hola, durante mis vacaciones en Michoacán, México, ví el mismo tipo de letreros. Y hasta cierto punto se vuelve un tema de debate delicado. Por ejemplo, estoy de acuerdo que al asistir a un templo (una iglesia en éste caso) hay que mostrar respeto por los demás y por el lugar mismo. Pero a su vez la petición por vestirse apropiadamente se puede volver una imposición y requisito obligatorio para poder entrar a una iglesia; limitando algunas libertades como la de elegir como vestir.
ResponderEliminarLo mejor es que la gente que asista a una iglesia o templo de cualquier religión, se muestre respetuso.
-En fin- Saludos y que tengas excelente inicio de semana.
Un claro indicio de eso que se llama hipocresía. Vestimenta adecuada para un templo... Aquí también se ve.
ResponderEliminar¡Claro! Hay que evitar que los adolescentes se masturben viendo un hombro o una rodilla, elementos pecaminosos de por sì. Así como las mujeres pueden pecar viendo pelos de pata.
Penoso, la foto es un testimonio de cuánto han olvidado sus orìgenes ciertas estructuras religiosas.
Besos
En la sinagoga de calle catamarca de acá, las mujeres rezan separadas de los hombres, y la parte inferior del cuerpo está tapada por una pared, para que los hombres no se distraigan mientras rezan. Aunque no hay restricciones en qué ropa se puede usar.
ResponderEliminarY bueno, todos sabemos que las religiones no se caracterizan por dar libertades sino restringirlas, quien quiera pertenecer a una tiene que aceptarlas no?
Beso
jajajaja.. Buenisima!!!.. "Ud. no vió el cartel de la entrada?"
ResponderEliminarBesitos!!!!
Me hizo recordar un cuento viejo, que decía así.
ResponderEliminarUna mujer que escapaba de un abusador, con el torso desnudo, ingresa corriendo a una iglesia para pedir auxilio.
Cuando está entrando, un sacerdote la ve y la detiene, diciéndole: -No hija, así no puedes ingresar- mientras le observaba con atención los pechos...
La joven, llorando le implora: -¡¡Pero padre, ¿cómo no voy a poder ingresar? ¡¡necesito auxilio... tengo el derecho divino!!
-...Si y el izquierdo también, ¡¡pero así vestida, no puedes entrar!!
Besotes!!
Si consideramos que la religión (todas) son cuestiones espirituales que afecta a la sensibilidad humana de quien la profesa, la comprendamos o no, debemos respetarla. Si el cartel estuviera en la puerta de un teatro no nos llamaría la atención sino el pensar cómo a alguien se le ocurriría entrar de esa manera. Los que profesamos una religión (cualquiera sea) no nos molesta que entren a ver (aunque no somos fenómenos de circo). Nos molesta que pretendan cambiarnos la manera de ser sólo porque el visitante no entiende.
ResponderEliminarA pesar de ellos hay religiones que no permite entrar en sus templos si no es con una invitación y con la vestimenta que demanda esa espiritualidad.
Explicar el por qué de ese cartel llevaría más espacio que el que se dispone, pero no se trata de pecados ni de tentaciones. El templo no es un espacio público.Al que le molesta, con no entrar, suficiente.
Perdón por mi lata.
Saludos
Cuando estuve en España, la entrada de los templos tienen un cartel similar pero con más íconos: por ejemplo, no se puede entrar comiendo, tomando helado o meterse el dedo en la naríz, jeeeee
ResponderEliminarbesos
Ahjaja, me hizo gracia la historia de la Candorosa.
ResponderEliminarSiempre me pareció fea la catedral de Buenos Aires, pero no recuerdo haber visto los carteles.
Si recuerdo la primera vez que entré alli, iba con mi madre y mis hermanos y pasamos frente a una pequeña vitrina donde hay una virgen que hasta hoy no sé cual es. La cosa es que uno de mis hermanos dijo "esa virgen tiene una joroba" y el otro empezó a los gritos "Nuestra Sra de la Joroba!!!", mi vieja casi los mata en plena iglesia. Y a mi me dió mucha pena la imagen, de verdad tenía como una especie de joroba.
Nunca la olvidé.
un beso
Cuando yo era una nena no se podía entrar a la iglesia sin la cabeza y los hombros cubiertos. Una noche pasamos por la iglesia de Escalada y se nos dió con mi mamá por entrar para ver novias, nos sacaron rajando porque entramos sin esos dos requisitos. Pensar que ahora las novias se casan con unos escotes hasta el ombligo por delante y hasta el nacímiento de la raya del cutis por la espalda. Besos tia Elsa.
ResponderEliminarMuy curioso lo que contás, Mariela y ahora que lo pienso es muy entendible, por allí en BS As se están quedando quizás ya sin capacidad de asombro...aquí en Rosario, por lo menos por ahora, seguimos teniendo una cuota! ejjejee.
ResponderEliminarMuy gráficos los dibujitos de la entrada de hoy!...jejejeje
un abrazo!
y si te queres casar de minifalda y vestido strapless?
ResponderEliminarsaludos
¿Desde cuándo está ese cartel en la catedral?? ¡Jamás lo vi! Igual, hace años que no entro... Antes iba porque cada tanto una orquesta tocaba música de Bach... entre otros compositores. Y no recuerdo ese estúpido cartel.
ResponderEliminarMe alegro que hayas disfrutado de tu estadía en Buenos Aires.
Un beso.
Me gusta la idea, más aún teniendo en cuenta que somos los hijos paridos del rigor y si muchas veces no nos vienen con leyecitas escritas o graficquitos claros, muy difícilmente acatamos las órdenes o nos sumimos en el sentido común. Besos
ResponderEliminarMe parece muy bien, el dueño de casa debe indicar cuales son las normas a respetar sino en donde estamos. Un gran abrazo.
ResponderEliminarHace muchos años, 15, más o menos, vi un cartel igual en Paraná, pero estaba dibujado a mano, en una iglesia de barrio. A mí me llamó muchísimo la atención, porque yo unos años antes, iba a la Acción Católica de la catedral de Paraná, con musculosa y pantalón corto, y nadie me decía nada.
ResponderEliminarEs una invitacion a hacer librepensardor o politeista.
ResponderEliminarPor favor, tengan en cuenta la esencia.
No lo hubiese imaginado.
ResponderEliminarEstá bien que hay mujeres algo descaradas para vestirse a la hora de ir a un templo, pero, tampoco la pavada, no prhiben ir con falda larga, pero transparente, por ejemplo.
ESTUVISTEENMI PROVINCIA¡¡¡¡ESPERO QUE TE HAYA GUSTADO¡¡¡
ResponderEliminarMIRA, POR MOMENTOS CREO QUE , LA RELIGION HABRIA QUE VIVIRLA DE OTRA MANERA, SIN LLENARSE DE TANTOS PREJUICIOS, NO SE CREO QUE VA MAS ALLA , ES MAS LO ESPIRITUAL QUE LA ROPA QUE SE USE ¡¡¡
UNBESOTE MARIELA
Ah, yo anduve por ahí este finde también (bueno, más precisamente en Ituzaingó, pero pasé por capital un par de veces). Mis escotes no son aptos para la iglesia :P
ResponderEliminarQue lástima que no me enteré de tu estadía me hubiera gustado mucho poder conocerte, acordate que sos mi lectora de la primera hora.
ResponderEliminarRespecto al dibujo la frase del Habtito no hace al monje tiene vigencia en este caso.
Ellos podrian dejarse de joder con la indumentaria ya que con sotana han hecho muchos descalabros.
Besos
Uy, creo que muchas veces fui en bermuda!!!, es que los carteles en portugués mucho no los entiendo (mis chistes cada vez son más malos)
ResponderEliminarLo que me hizo reír, fue eso de que hay que sacar la foto bien cerquita…sino te llevan por delante.
Es cierto que acá nadie te mira, podes caminar desnudo o vestido de empanada…está todo bien, eso me gusta, genera un poco de libertad.
Un abrazo!
Pd: no entiendo eso de los top comentaristas, a veces voy último, después primero, es como la tabla del promedio del fútbol, tabla que veo mucho…siendo de Racing, bah…capaz esa la tabla la entiendo mejor, siempre estamos últimos jajjaja.
excelente Dora querida, te cuento que en la iglesia de mi barrio si bien no hay un dibujo tan explícito si hay un cartel refiriéndose a lo mismo, tendrán que volver a las mantillas???
ResponderEliminarEs un tema por demás controversial. Nosotros pensamos que Dios no se fija mucho en lo que llevamos puesto, sino en nuestro corazón. Pero tampoco podemos entrar a una iglesia, o andar por las calles, de cualquier manera. Ese ingrediente se llama urbanidad, y muchas veces nos hace falta.
ResponderEliminarSaludos y cariños.
voy a poner un cartelito asi en mi edificio, el del 3ª es decadente en musculosa!!
ResponderEliminarTucuMALA
Estoy en este caso muy de acuerdo con el comentario de persis. El ámbito de un templo no es privado ni público asi que no es de extrañar que se pongan requisitos de admisibilidad.
ResponderEliminarLamentablemente en este caso esas pautas tienen que ver con una especie de decoro bastante absurdas que tiene que ver con cubrir o descubrir ciertas partes del cuerpo.
De todos modos sería de esperar que se puedan tener ciertos criterios estéticos en todos los ámbitos compartidos ya que muchos al amparo de la libertad, la comodidad o la informalidad hacen un auténtico culto al vestir mal.
pero ahi no dice nada de lso forros para cogerse al monaguillo! que imprudencia che...
ResponderEliminarCreo que el cartel en la iglesia es autoritario. A la gente no hay que decirle que se viste con decoro para entrar a un templo.
ResponderEliminarLa próxima vez que vaya, usaré mi bikini y mi marido su sunga. Eso sí, llevaré el pareo por las dudas.