Sin medidas
Yo: –Amor, con todo mi amor y respeto, quiero preguntarte
¿por qué me servís el té con menos agua y no hasta arriba?
Athos. –¿Por qué me decís eso?
Yo: –Porque vos me dirías…
Athos: –Yo no mediría nada, si no mido nunca, ¿cómo voy a
medir el agua del té?
Yo: –No, no, vos me dirías si algo te molesta.
Y ahí no paramos de reírnos.
Y ahí no paramos de reírnos.
Madre: –(dulce) Mirá la palomita, está buscando a su mamá…
Hijo adolescente: –(áspero) ¡Mamá!, ¿sabés cuántas palomas
hay en la vida?
Muy bueno lo de la antipoesía. Ese dialogo es muy verosimil.
ResponderEliminarTambien es interesante, me causó gracia el dialogo mal entendido, por la confusión entre me dirías y medirías.
Puede suceder, como también hay palabras en distintos idiomas que se escriben igual.
Entré en alguno de los blogs que recomendas.
Tengo un posteo nuevo.
jejeje...cuando no nos ponemos de a cuerdo en los códigos, la comunicación puede ponerse muy dificultosa!
ResponderEliminarUn abrazo.
Ah bueno el diálogo entre Athos y vos termino en risas, eso es llevarse bien y amor. En cuanto a la madre y el hijo me hace acordar a mis díalogos con Dami jaja!
ResponderEliminarBesos.
jaja muy bueno!!!!!! por algo los quiero tanto!
ResponderEliminarEl Demiurgo de Hurlingham: El diálogo de la madre y el hijo es real, los protagonistas son vecinos míos.
ResponderEliminarEl diálogo entre Athos y yo nos sigue haciendo reír.
Me alegro de que hayas entrado en alguno de los blogs que recomiendo. Los sigo recomendando.
Saludos.
Neogeminis: Y sí, es que el lenguaje no sirve para comunicarse, también sirve para incomunicarse.
Saludos.
tia Elsa: ¡Gracias! Sí, nos divertimos mucho.
Mi vecina y vos saben lo que es tener un hijo adolescente.
Saludos.
Vane: ¡Gracias! Y nosotros también te queremos a vos.
Besos.
Tengo un posteo nuevo en mi blog, posterior a que te mencioné.
ResponderEliminar¡Fue muy gracioso!
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